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Algunos estados anímicos y físicos pueden generar problemas en nuestras relaciones sexuales. En Mesana te ayudamos a descubrir el origen de estos problemas y la solución de los mismos.
Cuando nuestro cuerpo es cuna de ansiedad, depresión, estrés, fobia, control u otras manifestaciones insanas, es imposible que esté conectado con el impulso sexual, con nuestros deseos o necesidades.
En este estado es natural que nos encontremos con una sexualidad monótona, genitalizada, incompleta, patologizada (eyaculación precoz, anorgasmia, disfunción eréctil, etc.) donde se descargue la tensión acumulada, pero no se goce ni se disfrute, en definitiva, una sexualidad totalmente desconectada del ser y del encuentro.
Esta situación conlleva un gran vacío, insatisfacción y sentimiento de soledad.
El origen de la mayoría de las dificultades sexuales es la incapacidad de contactar con la(s) otra(s) persona(s), incluso consigo misma, muchas veces debido a una educación deficitaria, malas experiencias o experiencias traumáticas donde la persona no ha sido vista ni respetada como tal.
La propuesta es a través de ver a la persona completa, no sólo tratando la disfunción, el coito, la erección, excitación y orgasmos si no el vínculo, el contacto,el encuentro, la presencia, otredad, la retirada, y de esta manera reencontrar la naturaleza espontánea, genuina e ingenua (sin prejuicios) de la persona y que aprenda a disfrutar de su sexualidad siendo cada vez más libre.
La sexualidad es en sí misma un camino de búsqueda y de auto-conocimiento.
A cualquier persona que desee disfrutar de su sexualidad de una manera sana y plena, ya sea de forma individual, en pareja, trieja o cualquier otra forma poliamorosa.
Iniciar un camino de crecimiento personal a través de la superación de las disfunciones y dificultades presentes en la relación sexual consigo misma o con otras personas, eliminando tabús e ideas preconcebidas o malos hábitos que impiden disfrutar de la sexualidad.
Explorar tu sexulidad desde un enfoque totalitario e integrador(área emocional, corporal, relacional y cognitiva) a través de tu propia vida y entender mejor cómo la vives y la relación que mantienes con ella.